Esta pasada semana el pueblo boricua ha comenzado a expresarse contundentemente en contra de la privatización de la energía. Tanto Luma Energy que tiene a cargo la transmisión y distribución, como Genera PR, que como su nombre indica, tiene la función de generar, han sido puestas bajo aviso.
Comenzando con la derrota del gobernador en las primarias de su partido, que recibió el mensaje de repudio por haber sido un incompetente administrador de la colonia, pero sobre todo, por haber defendido y justificado a las compañías energéticas privadas que tanto sufrimiento están causando a nuestra gente.
Pero el acabose fue a mediados de semana. Después de que por casi dos semanas varios pueblos en el sur soportaran la falta absoluta de luz, lo que en muchos casos significa además la falta de agua que llega por bombas eléctricas, bajo una racha de calores intensos, ocurrió un apagón de gran escala en el norte de la isla.
Fuimos más de un millón de personas que permanecimos a oscuras por más de diez horas. La Universidad de Puerto Rico tuvo que cancelar clases, el Centro Médico y oficinas de salud tuvieron que cancelar citas a sus pacientes. Total, que la vida se le afectó a la mayoría del país.
Pero como esto no le importa a estas privatizadoras, ni siquiera le dieron la cara al pueblo para explicar las causas. Fue luego de varios días que vinieron con la excusa de que la culpa la tenían los árboles. Y que para eso está esperando por fondos federales de emergencia para hacer un talado que durará por 3 años y comenzará el 1 de julio. O sea, que en vez de podar sistemáticamente como lo hacía la compañía pública, intentan deforestar dondequiera que haya líneas eléctricas y así hacer su trabajo más fácil, a costa de las consecuencias devastadoras para el clima y nuestro pueblo.
La incompetencia de Luma, que ya ha estado aquí por tres años, y que tuvo un año antes de comenzar el contrato para conocer el sistema, es inconcebible. Y así el pueblo ha estado respondiendo. Desde la primera noche del apagón casi general, comenzaron a manifestarse frente a la Fortaleza, la sede del gobernador y ya han sido convocadas varias manifestaciones que incluyen hasta cacerolazos cada noche a las 8 de la noche.
Lo que se augura es que es poco el tiempo que le queda a Luma y a Genera porque el pueblo pide que se les ANULEN los contratos y que la energía vuelva a las manos del pueblo.
Desde Puerto Rico, para Radio Clarín de Colombia, les habló Berta Joubert-Ceci
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